Calle de los Mancebos de Madrid

En pleno centro de la ciudad de Madrid, en el barrio de La Latina, nos encontramos una serpenteante calle, aparentemente tranquila. Pero las baldosas ilustradas que la identifican, tienen una interesante historia que contarnos. Se trata de las denominadas Calle de los Mancebos y Calle Angosta de los Mancebos, ramificación de la primera, ambas forman un recorrido cargado de historia.
En dichas placas aparecen dos mancebos, quiénes podían ser jóvenes o criados, en situaciones muy diferentes. El relato comienza con una tragedia que se remonta a la Edad Media, más concretamente durante el reinado de Enrique I de Castilla, quién sería asesinado supuestamente por esos dos sirvientes.
En la placa de la calle Angosta de los Macebos (única en Madrid con esa denominación, debido a su escasa anchura), se puede observar la interpretación gráfica de cómo los muchachos arrojaron una teja desde lo alto de la torre del Palacio Episcopal de Palencia, asestando con ella un golpe mortal en la cabeza del monarca. Éstos fueron arrestados y trasladados a Madrid, a una torre en la Calle de los Mancebos, en cuya placa se puede ver a los mancebos esposados, y que más tarde serían degollados y enterrados en el mismo lugar.
También hay una segunda leyenda que cuenta que esos letreros correspondían a la representación de unos traviesos pajes del Marqués de Villafranca que habitaban dentro de esos muros, y que desde la calle se podía escuchar el estruendo provocado por sus trifulcas y celebraciones.
Un curioso lugar en pleno centro madrileño, dónde pararse un momento a dejar volar la imaginación.

Fotografías: ABC